La hipertensión arterial, comúnmente conocida como "presión alta", es una de las condiciones más extendidas y peligrosas a nivel mundial. Si bien muchas personas son conscientes de factores de riesgo como la obesidad, una dieta inadecuada y un estilo de vida poco saludable, es menos conocido el vínculo entre la inflamación crónica de bajo grado y la hipertensión.
Prevenir la diabetes, identificando predisposiciones genéticas y factores relacionados con el estilo de vida, puede agregar significativamente años de vida sana. Un enfoque basado en la medicina personalizada es fundamental para mejorar la calidad de vida y el bienestar, permitiendo indulgencias ocasionales sin sacrificar la salud.
La inflamación es un proceso fisiológico en sí mismo positivo, necesario para defender al organismo. Múltiples factores, como los desequilibrios alimentarios o las infecciones virales crónicas, pueden generar una condición inflamatoria crónica y persistente que está en la base de diversas patologías.